CIUDAD DE MÉXICO. Al manifestarse sobre la situación que atraviesan los productores de trigo, en México en general y en Baja California en particular, la senadora Nancy Sánchez señaló que “las condiciones de la economía mundial incidieron para que en 2022 la tonelada de trigo se cotizara en 8 mil pesos la tonelada.

En este panorama, todos los productos elaborados con trigo subieron de precio. En 2023 siguen al alza estos productos, pero el precio internacional del trigo se desplomó y los industriales, que conservarán su mismo nivel de ingresos por la ola alcista, se niegan a apoyar a los productores que generan su fuente de ingresos”.

Al manifestar que el precio total de $6,075.oo pesos por tonelada, que incluye un apoyo de parte de los gobiernos federal, estatal y municipal no cubre siquiera los costos de producción de los trigueros, añadió que “el intermediarismo sigue siendo el gran cáncer del campo mexicano. Mientras los productores arriesgan su patrimonio en cada temporada agrícola, los inversionistas se aseguran de recuperar el capital invertido y de obtener jugosas ganancias a costa del esfuerzo ajeno”.

Agregó que el concepto de mercado libre se ha desvirtuado por la participación de los intermediarios. “En este panorama, los precios de garantía fijados por el gobierno federal, lejos de ayudar, presionan más a los productores agrícolas a la hora de comercializar sus productos. Es un contrasentido que se destinen miles de millones para subsidiar gasolinas y no se apoye a los productores del campo cuando los precios internacionales del trigo se desploman”, mencionó para finalizar.

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