Salvador García Estrada
El funcionamiento de las llamadas empresas outsourcing en nuestro país, sigue generando controversias en el ámbito empresarial, obrero y legislativo. Prueba de ello es que el senador morenista Napoleón Gómez Urrutia, presentó hace tiempo una iniciativa de ley encaminada a “erradicar la creciente practica del outsourcing ilegal y regular el legal.”
En opinión del también líder obrero de los mineros de México, quienes se dedican al manejo de este tipo de empresas prestadoras de servicios, han provocado una evasión fiscal que asciende a 500 mil millones de pesos al año, ya que al no pagar al Seguro Social, las cuotas obrero patronales de manera correcta, este deja de percibir anualmente 50 mil millones de pesos.
De aprobarse las reformas propuestas por el legislador morenista, resultarían altamente beneficiados, en primer término, los trabajadores, el erario federal, IMSS y el Infonavit, al recuperar ingresos que hoy les son escatimados por algunas empresas sourcing que realizan esas malas practicas administrativas.
Pero, ¿cuál es el estado que guarda la iniciativa en cuestión? ¡Asómbrese! En opinión del analista Carlos Fernández Vega, gracias al también senador Ricardo Monreal, luego de haber sido aprobado por unanimidad el dictamen por la Comisión senatorial correspondiente, fue enviado al congelador, en donde se encuentra desde diciembre del año pasado.
Mucho tuvo que ver en ello la presión ejercida por más del 80% de empresarios representando a los que practican el outsourcing ilegal, ante el senador zacatecano, quien frenó el proyecto con el pretexto de que proceder en sentido contrario, “sería incumplir acuerdos con los empresarios”.
Ante tan incierta situación, el presidente Andrés Manuel López Obrador, anuncio el envío de su propuesta sobre el sonado tema, argumentando: “esa modalidad de contratación también es fruto podrido del periodo neoliberal; vamos a tratar de enderezar entuertos con una iniciativa de ley para proteger a los trabajadores y corregir los tremendos vicios creados.
El solo anuncio presidencial alborotó el avispero, que apoya Monreal y, según Gómez Urrutia, los empresarios que se han beneficiado de la subcontratación laboral “han incrementado sus presiones y cabildeos en el Congreso para impedir que termine la evasión fiscal y explotación de los trabajadores, incluso amenazando con desestabilizar al gobierno federal”.
Así las cosas, vale preguntar ¿qué tratamiento darán los legisladores a la anunciada propuesta presidencial? ¿Qué actitud asumirá el senador Monreal? Habrá pues que estar muy pendientes. ¿A propósito, cuanto outsourcing operan en industria maquiladora bajacaliforniana?
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