Hugo Méndez Fierros*
Cetys Universidad recién ha cumplido 59 años. Sin duda, la universidad privada central en el sistema de educación superior de Baja California. Su visión 2020 dicta “Ser la mejor institución en Latinoamérica en MBA con enfoque a Emprendimiento y en Ingeniería con enfoque a Innovación y Diseño”. Es una meta en proceso. Entendida como enunciado visionario, es lo que las estrellas para el marinero, un haz luminoso que orienta el camino a buen puerto.
A fines de 2018 concluí una investigación sobre liderazgo en la educación superior de Baja California, en equipo con el Dr. Alberto Gárate, vicerrector académico de Cetys y el Dr. Joaquín Caso Niebla, coordinador general de Planeación y desarrollo institucional de la UABC; un producto fue el libro en coautoría Líderes de la Educación Superior en Baja California: Relatos de Vida e Identidades Profesionales.
El rector, Fernando León García, fue entrevistado en dos sesiones largas: “En retrospectiva, mis años de trabajo me definen por estas constantes: calidad e internacionalización… Su trayectoria formativa lo define. Estudió posgrado en administración educativa (maestría y doctorado) en Stanford…”. Su ir y venir por el mundo universitario, como responsable de programas y alianzas de universidades estadounidenses fuera de EUA, que incluye a Eslovaquia, Grecia, Suiza, Canadá, China, Brasil y Australia. Lo sitúa en el segundo elemento: la internacionalización.
Dr. Fernando León, rector de Cetys Universidad
Conozco la memoria oficial de Cetys Universidad, la he estudiado y comunicado. Con base en indicadores institucionales vigentes y en la historia de vida del entrevistado, reafirmo lo señalado por estudiosos del liderazgo educativo, las historias personales determinan una fuerte identidad profesional y esta se vincula con prácticas de liderazgo exitosas. En el plano educativo, se dan un conjunto de acciones orientadas a influir en otros para desarrollar comprensiones compartidas acerca de las metas a alcanzar.
En el caso de Cetys, siguiendo la narrativa de su rector, encontramos esa raíz: “Mi formación escolar está ligada a la muerte de mi padre, originario de Cantón, China e inmigrante que llegó a vivir a Mexicali. Él murió cuando yo tenía 6 años. Antes de morir, hizo un pacto con mi madre para que hiciera todo lo posible por darle educación a sus tres hijos y que, si las circunstancias lo permitían, parte de esa educación fuese en Estados Unidos. Y la madre cumplió la tarea sin declinar. No descansó hasta ver que sus tres hijos obtuvieron doctorados en sus respectivas disciplinas”.
“Regresé al Cetysy a la rectoría por un conjunto de factores. Uno de ellos es que a uno le nace y desarrolla cariño por aquello que considera que ha sido parte de nuestra vida… Me invitaron a que me reincorporara para que integrara en lo posible todos los beneficios y virtudes que la internacionalización me había permitido experimentar y llevar en otros lugares del mundo…”.
La investigación sociocultural me ha enseñado que la vida de mujeres y hombres que integran una institución, estructuran y dan forma específica a esa organización. La imagen de las universidades es una construcción simbólica que expresa las acciones de los actores sociales que las integran. Aquí habita la importancia de estudiar las historias de vida y las identidades.
Al final del día, las universidades proyectan lo que sus líderes son y hacen, dentro y fuera. Ayer, hoy y mañana.
*El autor de esta publicación es profesor-investigador en la Facultad de Ciencias Humanas, UABC.
