Durante la ceremonia por el Día del Niño en Mexicali celebrado al interior del edificio del poder ejecutivo, la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda defendió su postura en la extinción del Fideicomiso del Desarrollo Empresarial de Baja California (FIDEM) argumentando que los recursos públicos deben destinarse a proyectos de mayor impacto social, como la infraestructura educativa.
La mandataria subrayó que la extinción del fideicomiso no es un tema nuevo, sino una discusión que ha estado presente desde el inicio de su administración. Según Ávila Olmeda, el FIDEM ha sido modificado para fortalecer la colaboración entre el gobierno y el sector empresarial, pero insistió en que los recursos provenientes del impuesto sobre nómina—el más alto del país—no pueden ser utilizados de manera discrecional por un solo sector.
“Todo impuesto es un recurso público que debe ser administrado con transparencia y en beneficio de la sociedad en general”, afirmó la gobernadora, quien también destacó que la sobretasa del impuesto sobre nómina fue eliminada el año pasado, como parte de las medidas para equilibrar las cargas fiscales.
Aunque reconoció la buena relación con el sector empresarial y se comprometió a dialogar sobre el tema, Ávila Olmeda enfatizó que la prioridad de su gobierno es garantizar que los recursos públicos se utilicen para proyectos que promuevan el bienestar social, como la educación, en lugar de enfocarse exclusivamente en el desarrollo empresarial.

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