ESPECIAL/TREMENDA LA COSA
SAN LUIS RÍO COLORADO. A una semana de haberse cedido la seguridad en la ciudad a la autoridad estatal, membros de ésta se encuentran en el ojo del huracán tras una serie de penosos incidentes que han protagonizado.
El pasado sábado por la mañana, un video mostró a un agente de la Agencia Ministerial de Investigaciones contra el Crimen (AMIC) impactando su vehículo contra una palma, para luego ser captado orinando en la vía pública.
Aunque las imágenes han hecho pensar que el elemento se encontraba bajo los influjos del alcohol, sus superiores indicaron que ante la imposibilidad de comprobárselo, el elemento ha recibido solo una amonestación..
Ese mismo día, pero por la tarde, una unidad de la Policía Estatal Preventiva (PEP) asignada al Mando Único en San Luis, chocó contra tres vehículos, uno de ellos en circulación y otros dos estacionados, en el crucero de la calle 21 y el callejón Tlaxcala.


El domingo, en la avenida Quintana Roo y la calle Benjamín Hill, agentes de la AMIC, la Policía Estatal del Mando Único y elementos militares ingresaron sin orden de cateo a una casa, dejando la vivienda patas pa’ arriba, sin encontarar ningún ilícito en su interior.
El dueño de la vivienda denunció que, además de los destrozos en las puertas de acceso, desaparecieron joyas, cámaras, prendas de vestir y 20 mil pesos en efectivo.
Tras de estos incicentes, el jefe de la AMIC, Carlos Flores; el director de la Policía Única en San Luis, Jesús Antonio Cruz Fusio, y el general del XX Regimiento de Caballería Motorizada, deben tomar cartas en el asunto para controlar a sus oficiales y evitar más abusos como los señalados.