Mexicali. Se robó una lámpara del alumbrado público y dejó sin energía eléctrica a medio Palaco. Este sujeto apodado “El Rocky”, se dedica al robo de metales desde hace tiempo, pero ahora fue el colmo. Vecinos piden a la autoridad que intervenga, pues ya dejó a la colonia Carranza sin altos de disco, cuyos postes vende en las chatarreras de la zona.
Eran cerca de las 18:00 horas cuando vecinos de la calle A, de la colonia ubicada en las inmediaciones del corredor industrial Palaco, notaron que la energía eléctrica se les fue de manera repentina. Cuando salieron a ver lo que sucedía, vieron a uno de los ya famosos ladrones de metales de esta comunidad cargando con una enorme lámpara del alumbrado público, con la cual partía plaza por enmedio de la calle.
Pero más fue la sorpresa de los vecinos -quienes aseguran que de inmediato reportaron los hechos al 911- al ver que el mismo ladrón se ponía a desarmar, ahí, en la vía pública, la lámpara que después llevaría a vender al negocio donde le reciben también los postes de los altos de disco que ya se ha robado de cada esquina de esa comunidad, a cambio de los cuales recibe 300 pesos por cada uno.
Luego, el ladrón se retiró del lugar, dejando un tiradero de cables de distintas compañías -de la CFE, del teléfono, del servicio de televisión de paga, etc.- tirados en plena calle.
La patrulla, al menos en la media hora posterior a lo ocurrido, no llegó, y la energía eléctrica tardó en arribar varias horas en algunas zonas, pero en otras seguía ausente hasta la tarde de este jueves, según comentaron después los vecinos afectados.
El apagón no solamente afectó a los residentes de la calle A de la colonia Carranza, quienes ya de por sí tienen que entrar y salir de su comunidad con sumo cuidado, no solo por la inseguridad, sino por las condiciones en las que se encuentra esta vialidad, desde hace años devastada, sino que también dejó sin energía eléctrica a los semáforos de la avenida San Pedro Mezquital y a varias cuadras a la redonda.
Entre los vecinos afectados, quienes salieron a platicar entre si a ver qué había sucedido, estaba uno que, preocupado, expuso que su esposa acababa de salir del hospital tras una intervención quirúrgica, y que necesitaba urgentemente el servicio de energía eléctrica, para atender su convalecencia y obviamente paliar las altas temperaturas dentro de su casa.
Los vecinos explicaron que el robo de metales en esta zona es tan común que ya no pueden dejar nada mal puesto en las afueras de sus domicilios, pues las personas como El Rocky buscan cualquier oportunidad para llevarse cualquier objeto metálico sea lo que sea y sea de quien sea, y como se trata de robos no cuantiosos, las autoridades no los atienden debidamente.
