Mexicali, B.C., Durante su visita a la capital del estado este domingo 11 de octubre, el gobernador de Baja California Jaime Bonilla Valdez, volvió a tocar el tema de su antecesor, Francisco Kiko Vega de Lamadrid, quien aseguró, terminará en la cárcel cuando se logre comprobar que es culpable de los cuatro delitos de los que se le acusa.

El mandatario estatal aseguró que el panista, el último en ocupar el cargo de Jefe del Ejecutivo en el estado, emanado del Partido Acción Nacional, ha corrido con suerte ya que la pandemia por COVID-19 generó el cierre momentáneo de juzgados, lo que retrasó que se le girasen citatorios, además de que la misma situación de salud pública obligó a una pausa de actividades de otras oficinas que aportarían pruebas contra el ex mandatario.

Ante medios de comunicación aseguró que la respuesta de Vega de Lamadrid y de su esposa, Brenda Roacho, quienes acudieron al Ministerio Público en Mexicali y Tijuana -respectivamente- el pasado viernes, se dio después de tres llamados que hizo esa oficina de la Fiscalía Regional, lo cual era esperado, agregó, pues todos en su gobierno esperaban que el político blanquiazul buscara todas las formas posibles de evadir a la ley.

Ya durante su discurso en la Jornada por la Paz de este domingo realizada en las inmediaciones de la céntrica colonia Bellavista, en Mexicali, el jefe del ejecutivo estatal aseveró que el proceso contra Vega de Lamadrid no es una cacería de brujas, sino que es una de las exigencias de los ciudadanos cada vez que sale a las calles.

“No soy yo (el que persigue al ex Gobernador), es el pueblo. En todas partes que llego, en cada esquina que visito del estado me dicen lo mismo ‘Y ese Gobernador que nos robo, ¿quién lo va citar a declarar?’ Pues ya estaba citado desde hace tres meses pero por la pandemia estaban los juzgados cerrado. Pero ahora que se han estado re aperturando vemos por primera vez que se le cita a un ex gobernador al bamquillo de los acusados”, expresó Bonilla Valdez.

El Gobernador emanado del partido MORENA, señaló que su antecesor llego a Baja California “con una mano enfrente y una atrás” y después tenía ya más de 100 edificios a su nombre y una casa de 5 millones de dólares que no ha explicado de donde provinieron.

Los delitos que buscan imputársele a Vega de Lamadrid son peculado, abuso de autoridad, negociaciones ilícitas y coalición de servidores públicos. Según del código penal estatal, ninguno de los delitos alcanza fianza.

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