Ciudad de México.- La generación de energía eléctrica es un tema de seguridad nacional y debe prevalecer, en consecuencia, la rectoría del Estado sobre un servicio que es estratégico para el país, expresó la senadora Nancy Sánchez Arredondo.
Lugo de emitir su voto a favor de la reforma la Ley de Energía Eléctrica, una iniciativa preferente impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador aprobada por el martes pasado en el Senado de la República, la legisladora del Grupo Parlamentario de Morena rechazó que se vaya a privilegiar la producción de energía con combustibles contaminantes.
“Quieren vender la idea de que solamente se busca promover la generación de energía eléctrica contaminante, buscando en realidad privilegiar el uso de energías intermitentes, que no aseguran un abasto constante y seguro, como ya se demostró con los apagones en el Norte de México y Sur de Estados Unidos”, dijo.
La Senadora de la República indicó que en el vecino país se apostó demasiado a energías que se congelaron y que quedaron, además, totalmente en manos de particulares que, al tener altísimos costos de gas, lo reflejaron en sus consumidores.
“Y esto”, puntualizó, “no pasó en México, ya que el gobierno mexicano atendió y resolvió la falta de energía provocada por el apagón en Texas, gracias a que de manera oportuna entró en operación el Sistema de Electricidad Nacional operado principalmente con plantas Hidroeléctricas”.
La senadora Sánchez Arredondo insistió en que un sector tan estratégico como es el eléctrico, no puede dejar de consolidar una empresa estratégica, “aunque cause ronchas a los puristas que creen que la inversión pública debe irse retirando de ese importantísimo sector”.
Esto, subrayó, es un tema de Seguridad Nacional.
Recordó que la reconversión no es un proceso fácil y basta decir que el carbón es, a la fecha, una de las principales fuentes de energía en todo el mundo e incluso en Estados Unidos y la mayor parte de su producción es consumido por el sector eléctrico y el resto se exporta.
El promedio mundial de generación de energía a base de carbón es del 36%, mientras que en México es de apenas el 7%, así que no nos vayamos con la falsa hipótesis de que esta iniciativa generará gran contaminación y que CFE es una empresa anacrónica y altamente contaminante, agregó.
Por otra parte, señaló que en ningún momento es desproporcionado ni retrógrado fortalecer a CFE para que tenga la capacidad de asegurar el abasto de energía eléctrica que simplemente mueve al país, acompañado siempre por el sector privado.
“Afectará cierta inversión privada, pero sólo aquella simuladora y fraudulenta donde se han detectado sociedades ficticias con capital mínimo (un dólar), las cuales utilizan la infraestructura de transmisión y distribución de la CFE”, puntualizó.
