Familiares de los agentes de la Policía Municipal de Mexicali fallecidos por COVID-19 preparan una denuncia penal colectiva por el delito de homicidio culposo contra de quien resulte responsable, además de la demanda por la vía civil para la reparación del daño, confirmó esta mañana el abogado Cuauhtémoc Castilla Gracia.

“Vamos a proceder conforme a la familia nos está indicando”, afirmó el abogado de los deudos del oficial de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, René Moore, uno de los fallecidos durante esta pandemia en el cumplimiento de su deber.

Castilla Gracia no descartó que, aunque la denuncia es contra quien resulte responsable, ésta pudiera llegar hasta la directora de Seguridad Pública Municipal, María Elena Andrade Ramírez, y la presidenta municipal Marina del Pilar Ávila Olmeda.

“El arresto del ex director de Bomberos ha sentado un precedente…ya los tribunales ya marcaron la pauta; no se trata del mismo caso, pero en este, hay una falta de supervisión y dirección, y eso se desembocó en la pérdida de la vida del oficial René Moore”, señaló el también instructor certificado por la universidad de San Diego en el sistema acusatorio adversarial.

En este caso, como en el del asilo de ancianos Hermoso Atardecer, se puso en evidencia la falta de protocolos y un error en la supervisión.

“Tenemos evidencia que él les avisó a sus superiores jerárquicos que él padecía de ciertas enfermedades que lo ponían en la tabla de personas vulnerables”, mencionó el también catedrático, quien agregó que familiares de los otros policías preventivos víctima de la enfermedad causada por el virus SARS-CoV-2, ya se han comunicado con su despacho a fin de sumarse a esta denuncia.

La alcaldesa Marina del Pilar Ávila Olmeda, y la directora de la DPSM, María Elena Andrade Ramírez, hicieron una guardia de honor en recuerdo al oficial Santos González, en la Comandancia Central de Policía.

Siguen los contagios por medidas ineficientes

Para Castilla Gracia, es evidente que poner a los policías a cerrar calles y el ordenar cerrar mercados no ha servido de nada y prueba de ello es que los contagios por COVID-19 en Mexicali no se han frenado.

No hemos visto, mencionó, que el Gobernador y sus secretarios, se sienten con los empresarios, con la sociedad  y junto con especialistas,  para escucharles y adoptar las recomendaciones de estos últimos.

“Hay que asesorarse de expertos y no implementar medidas al paso”, como las que se han adoptado en Mexicali, abundó Castilla Gracia, quien cuestionó la instalación de filtros viales en las calles de Mexicali, “como si el virus transitara solo por Lázaro Cárdenas o la Justo Sierra” y reducción de horarios para transitar y acudir a negocios de primera necesidad, como lo tienen que hacer personas que salen noche de su trabajo.

” El virus no es nocturno, no es vampiresco”, enfatizó el Licenciado en Derecho por la UABC y con Doctorado en Ciencias Penales.

“No es un tema de cerrar calles. ¿Con qué metodología científica determinaron ellos que no puede haber más de dos personas en un carro pero sí puede haber 15 o 16 personas en un camión urbano?”, cuestionó.

Para el académico de la UABC, las medidas tomadas hasta la fecha por el gobierno de Marina del Pilar, han sido “de relumbrón que no están beneficiando en nada”.

Deben la Alcaldesa y la Directora de Seguridad Pública, concluyó, de  asesorarse con expertos en epidemiología y sociólogos que les den alternativas para que la gente se quede en casa.

“No se pueden cerrar calles ni trabajos a lo loco…el tema económico es importante, hay que buscar las mejores maneras para evitar los contagios”, abundó.

Hay ciudades cuyas autoridades sí tuvieron estrategias adecuadas de movilidad y que desde el primero de junio están abriendo prácticamente todo, como Monterrey y Querétaro. “Aquí no tenemos unas estrategias adecuadas”.

En conclusión, esas sociedades, las que ya están abriendo, van a resentir menos económicamente el impacto, mientras que en Mexicali no se pueden abrir juzgados, empresas, iglesias, cines, centros comerciales, “porque no hemos podido desarrollar un plan operativo ciudadano para un ingreso a la Nueva Normalidad“.

Sin embargo, mientras los agentes están mandándose a cerrar las calles de la ciudad, el domingo pasado las dunas estaban atiborradas, de acuerdo a videos difundidos en redes sociales, y de cada diez personas ahí reunidas, sólo tres portaban cubrebocas.

Aunado a todo esto, la sociedad local es muy desobediente. “No nos importan los demás ni contagiar a nadie; no pensamos que podemos ser asintomáticos”.

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