MEXICALI. Toda aquella persona que se encuentre en el recinto legislativo de Baja California -ya sea con motivo de trabajo o de visita por cualquier motivo- debe tener garantizada su seguridad, además que debe garantizarse la integridad del propio inmueble, afirmó la diputada del PAN por el segundo distrito, María Yolanda Gaona Medina, quien propuso la creación de una comisión especial que investigue los hechos ocurridos el pasado 11 de septiembre, con el objetivo de esclarecer las circunstancias que llevaron a este acto de violencia.
Mayola indicó que esta comisión no solo debería enfocarse en los eventos de ese día, sino también en el manejo de futuras manifestaciones y en cómo podemos garantizar que se respeten los derechos humanos de todos los ciudadanos. “Es necesario contar con un marco legal robusto que proteja la libertad de expresión y que evite la criminalización de quienes se manifiestan en pro de una causa justa”, dijo.
En cuanto a los protocolos de seguridad del propio Congreso, la diputada Gaona precisó que “es importante revisarlos y actualizarlos, todo ello para que se implementen con respeto hacia la sociedad por parte de los cuerpos de seguridad del Estado, y solo si fuera realmente necesario”.
Asimismo, subrayó la obligación de formar y capacitar a los agentes de seguridad, un adiestramiento que debe incluir un enfoque en el respeto a los derechos humanos y a la libertad de expresión, para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro.
Hizo un llamado a la unidad a las diputadas y diputados que integran el Congreso de Baja California: “Independientemente de nuestras diferencias políticas, debemos ser capaces de unirnos ante una causa tan noble y urgente como la defensa de la democracia y los derechos humanos. Solo a través de un trabajo conjunto y decidido podemos generar el cambio que nuestra sociedad necesita y restaurar la confianza en nuestras instituciones”.
Finalmente, añadió que en México es necesario que se fortalezcan los cambios mediante el diálogo y el entendimiento, donde se escuchen todas las voces y se aborden las auténticas preocupaciones de nuestros ciudadanos. “No podemos permitir que la historia de nuestro país esté marcada por la represión y la violación de derechos fundamentales. La responsabilidad está en nuestras manos”.