El padre Ismael, de la diócesis de Ciudad Morelos, Valle de Mexicali, está detenido y a disposición de la Fiscalía General del Estado, acusado del delito de pederastia. El prelado de 51 años de edad, es acusado de cometer actos en contra de una menor de edad cuando ésta tenía 14 años. Al respecto la diócesis de Mexicali ha informado que mantienen los lineamientos de “tolerancia cero”, promovidos por el Papa Francisco, en este tipo de casos.
Fue el martes pasado cuando el sacerdote se entregó de manera voluntaria a las autoridades, quienes tenían una orden de aprehensión en su contra. Ya en la tarde del mismo día, se le formuló la correspondiente imputación por el delito de pederastia, en una audiencia de control donde se ofrecieron por parte de la fiscalía, detalles de los antecedentes de investigación.
Según lo expuesto por la fiscalía, estos ataques se dieron contra la menor desde el año 2012. En la audiencia el juez impuso al sacerdote prisión preventiva como medida cautelar, y un plazo de 72 horas para la vinculación a proceso.
Primero la víctima: Obispo
A través de una carta pública, la diócesis de Mexicali confirmó el arresto del sacerdote y señaló que fue él mismo quien se presentó de manera voluntaria ante las autoridades. La diócesis “está comprometida con los lineamientos del Papa Francisco de Tolerancia cero, en relación a la defensa de los menores; que somos los primeros interesados en el esclarecimiento de los hechos”, indica el mensaje firmado por el obispo José Isidro Guerrero Macías.
“Por tal motivo, al tener conocimiento de la acusación, nos acercamos a la parte acusadora y le brindamos toda la atención requerida…Hemos mostrado claramente nuestra disponibilidad a colaborar con las autoridades, al haber sido los primeros en notificarles de tal acusación, y al sugerir a la parte acusadora, que, a su vez, notificara también a las autoridades. Desde el principio, atender a la parte acusadora ha sido nuestra prioridad”, señala el comunicado.
“Toca a las autoridades establecer, por los medios legales, la inocencia o culpabilidad del acusado. Nosotros respetamos los procesos que marca la ley y, también, como lo establece la ley, presumimos, sin prejuzgar, la inocencia del Padre Isamael, mientras que no se pruebe lo contrario”.
“Como diócesis, somos los más interesados en el esclarecimiento de los hechos, hasta las últimas consecuencias. Una vez que se lleven a cabo las diligencias debidas en este proceso, estaremos en condiciones de ofrecer ulterior información”, concluye la carta, donde se precisa que no habrá, por respeto a las partes involucradas, principalmente a la demandante, más información al respecto mientras el caso no avance.
