Sus hijos escucharon el terrible momento. Verónica hablaba con ellos por teléfono, cuando escucharon que algo no estaba bien. Su madre dejó de hablarles y se escuchó ruido. Después no se escuchó ya nada. Fue así como la noche de este miércoles fue muerta al parecer por su pareja sentimental, quien se encuentra a disposición de las autoridades.

Eran las 20:00 horas cuando los hijos de Verónica García Martínez, de 45 años de edad, le reportaron a su tío que algo estaba mal con su mamá, que estaban hablando con ella cuando llegó su pareja y la llamada acabó por cortarse.

Su familiar, preocupado pues sabía que el compañero de su prima era violento y que ya la había golpeado y amenazado en ocasiones anteriores, fue a toda prisa a la casa de ella, ubicada en la avenida Totoltepec, casi esquina con la calle Cañada Morelos, en el fraccionamiento Rincones de Puebla. Se saltó el cerco de malla y tocó por las puertas y ventanas sin tener respuesta. Entonces decidió abrir la puerta de una patada y entrar.

Adentro encontró a su prima Verónica bañada en sangre, con varias heridas producidas al parecer por un cuchillo. De inmediato reportó los hechos al 911, número de emergencias desde donde canalizaron el reporte a agentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal comisionados a esa área sureste de la ciudad.

Policías municipales recabaron datos sobre lo sucedido anteriormente y reportaron los hechos a las unidades que se encontraban en servicio en el área, a fin de detectar y detener al hombre que vivía con Verónica, quien resultaba el principal sospechoso del feminicidio.

Treinta minutos antes de la medianoche, los agentes municipales detectaron deambulando por la avenida Petlalcingo, a la altura de la calle Cañada Morelos, del mismo fraccionamiento, a un hombre que caminaba con un cuchillo en la mano.

El sujeto tenía características similares a las del principal sospechoso del crimen, por lo que decidieron hacerle una inspección.

Los agentes lo interceptaron y le ordenaron tirar el arma al suelo, a lo cual accedió. Notaron que las ropas del detenido, identificado como Luis Hugo, de 50 años de edad, de origen peruano, estaban manchadas de sangre, y al momento del arresto, aseguraron el cuchillo de metal con hoja de un solo filo y terminación en punta, así como mango de plástico color negro, el cual tenía también manchas de sangre.

El sospechoso fue puesto ya a disposición de las autoridades estatales, que realizan las investigaciones correspondientes.

Foto principal: Archivo.

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