Mexicali, Baja California.- El Valle de Mexicali vuelve a ser escenario de enfrentamientos armados. El saldo: seis muertos, entre ellos dos calcinados y cuatro muertos a balazos en la zona norte de esta área rural, entre los que se encuentra Jesús Eduardo Garibay, alias “El Pechocho”, cuyo padre es propietario de gasolineras en esa misma zona.

Eran las 18:00 horas cuando en el ejido Las Campiñas, localizado al noreste del municipio, en las inmediaciones del Aeropuerto de Mexicali, reportaron el hallazgo de dos cuerpos humanos calcinados casi en su totalidad en un paraje desolado. Las personas no habían sido identificadas.

Vecinos de la zona fueron quienes reportaron al teléfono de emergencias 911 sobre el hallazgo, por lo que agentes policíacos acudieron a verificarlo.

En el lugar hallaron dos cuerpos bajo montones de vestigios de llantas quemadas, por lo que el área se acordonó para que personal del Servicio Médico Forense (Semefo) recogiera los restos, luego de que peritos recabaran evidencias en el lugar. En el área no se localizaron evidencias que pudieran ayudar a identificar a estas víctimas.

Una hora después, se reportó un enfrentamiento a tiros en la pista de carreras de la zona arenosa de Cuervitos, donde quedó sin vida un hombre que fue identificado como Jorge Ampelio Quintero, de 41 años de edad.

Según testigos, el hoy occiso fue a reclamar la ubicación de una motocicleta que le habían recientemente robado, pero su reclamo fue respondido a balazos.

El lesionado fue llevado a un centro de salud de la zona pero al llegar personal médico confirmó que ya se encontraba sin vida.

Por otra parte, media hora más tarde, en el área de las dunas de Ciudad Morelos se desató otra balacera, con saldo de tres personas sin vida, entre ellas una mujer.

La balacera se dio al final del evento Cuervitos Dune Fest, que fue organizado en apoyo a la Fundación Cruz Rosa contra el cáncer.

Según personas que se encontraban departiendo en la zona, fueron al menos diez detonaciones de arma de fuego las que se escucharon. Al final de la pista fue localizado, junto a un vehículo arenero, color gris, un hombre con heridas de bala en la cabeza, las cuales le habían causado la muerte.

Entre las víctimas se encontraba Jesús Eduardo Garibay, según los primeros reportes emitidos por las autoridades locales de manera extraoficial. En el lugar también falleció su esposa y un amigo de nombre Eduardo Lozano.

Estos hechos de violencia desataron intensas movilizaciones policiales en la zona rural y también en la ciudad, sin registrarse hasta esta noche personas detenidas en relación a los crímenes.

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