MEXICALI. La Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe fue el escenario del 16 aniversario episcopal del Obispo de Mexicali Enrique Sánchez Martínez, este fin de semana.
Previo a la celebración de la ceremonia eucarística, Sánchez Martínez recordó que hace 16 años fue ordenado como obispo en Durango, siendo auxiliar los primeros 7 años. Posteriormente, estuvo en Nuevo Laredo, Tamaulipas, durante 8 años, ya como titular de una diócesis.

“Es una responsabilidad diferente. Como auxiliar, asistes a las actividades del titular, y siendo obispo, ya eres el coordinador de una diócesis, pendiente de las necesidades de la Iglesia y de los feligreses”, detalló.
“Un obispo es llamado pastor de la Iglesia, otros lo llaman guía. Es un trabajo muy exigente, con muchos quehaceres”.
Señaló que el principal aprendizaje que ha significado ser obispo es descubrir la vocación al llamado de Dios, el cual percibió cuando ingresó al seminario. “Es algo que descubres, lo sientes, y cuando estás en el seminario lo vives, y se convierte en parte de ti”, comentó.

Al finalizar la misa, se realizó una verbena popular en el patio de la catedral.