Preocupa a la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco) la forma en que se están manejando los recursos destinados para la reconstrucción en las zonas afectadas por los sismos de septiembre pasado, tanto las aportaciones que gobiernos y organismos extranjeros como el presupuesto de la federación para el 2018.
El secretario de la Concanaco, Jorge Cervantes Arenas, sostuvo que lamentablemente la historia en el país nos ha demostrado que desastres naturales han sido la oportunidad para que gobernantes desvíen recursos y comentan serios actos de corrupción. Por lo que en ésta ocasión se levantan muchas sospechas de la forma en que se está utilizan las bolsas que se han generado para apoyar las labores de reconstrucción.
Preocupa en particular el tema del presupuesto para el año entrante, al cual se ha estaría aumentando indiscriminadamente para las entidades afectadas por los sismos sin algún tipo de control independientemente del gobierno, afirmó el entrevistado, quien sostuvo que los organismos de la iniciativa privada deben de ser los que vigilen el buen uso de los recursos.
Un ejemplo claro es el programa de autoconstrucción que está impulsando el gobierno federal en los estados que sufrieron grandes pérdidas de viviendas. La estrategia no tiene ni pies ni cabeza al no haber alguien que verifique que el dinero que se les entrega a las familias sea bien utilizado y no se construyan casas habitación sin medidas de protección civil o con los parámetros adecuados para que cuando vuelva a suceder un desastre natural esas mismas viviendas no vuelvan a sucumbir.
