MEXICALI. Brenda Jasive fue reportada como no localizada el pasado viernes 29 de marzo por sus familiares, quienes, preocupados, comenzaron a distribuir en redes sociales su fotografía y datos, para que cibernautas ayudasen a su ubicación. Por desgracia, ella apareció sin vida, envuelta en una cobija, en un almacén abandonado en la colonia Nacozari.
De 33 años, la víctima del que sería el primer feminicidio del año, fue encontrada poco antes del mediodía de este viernes dentro de un edificio ubicado en la avenida Blas López, a la altura de la calle I, en la céntrica comunidad mexicalense. Fueron vecinos quienes reportaron al teléfono 911 la ubicación de lo que parecía el cuerpo de una persona, envuelto en una cobija y semienterrado.
Policías municipales llegaron al sitio en respuesta al reporte hecho a la central de emergencias y, luego de confirmar que se trataba del cuerpo de una persona ya sin vida, acordonaron el lugar y pidieron la presencia de autoridades estatales, peritos y un agente del Ministerio Público, así como personal del Servicio Médico Forense.
La escena fue trabajada por los especialistas, en búsqueda de evidencias que ayudasen a resolver el crimen. Descubrieron que los restos humanos estaban atados con un cable eléctrico color negro y presentaba una herida en el área del cuello que le atravesaba hasta el tórax.
Fue horas después que se confirmó que el cuerpo hallado en la Nacozari correspondía a Brenda Jasive, y que la causa de su muerte fue un disparo de arma de fuego. Sus familiares acudieron al Servicio Médico Forense a reclamar el cuerpo.
La Fiscalía General del Estado hasta el momento no ha dado a conocer ningún avance en torno a las investigaciones sobre este feminicidio.