Mexicali, Baja California.- Este jueves 18 de marzo comenzaron formalmente los trabajos para desmontar la infraestructura que la empresa Constellation Brands había instalado en el ejido El Choropo, en el Valle de Mexicali, con miras en instalar una planta de fabricación de cerveza para importar a Estados Unidos.
Por ese motivo, miembros de grupos opositores a la firma de origen estadounidense realizaron una caravana desde la ciudad hasta la zona donde operaría la planta industrial para celebrar el desmontaje del sitio.
Una de las voces más sonoras durante ese periodo ha sido Filiberto Sánchez Gurrola. El integrante del grupo Resistencia Civil de Baja California, tiene sobre sí un total de once carpetas de investigación por diferentes actos de los que fue autor en diferentes protestas.
El activista apuntó que sólo dos de ellas se han cerrado a su favor, pero el resto siguen vigentes y solo se han pausado los procedimientos legales debido a la pandemia por la pandemia provocada por la enfermedad COVID-19, que ha provocado que los juzgados dejaran de operar en un tiempo, pero en cuanto regresen a su actividad habitual seguramente seguirán las audiencias.
Mencionó desconocer si con la salida de la empresa cervecera de la capital del estado se desestimen las denuncias o los representantes legales las retiren. Pero aún si así fuera existen otros demandantes contra activistas.
Constructora Cadena, la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Mexicali (Cespm) y la Secretaria de Comunicaciones y Transportes (SCT) son algunos de los demandantes junto a Constellation Brands, explicó el entrevistado.
Sánchez Gurrola restó importancia a la situación y aseguró que todo ha valido la pena para ver a la trasnacional fabricante de bebidas y alimentos fuera de Mexicali.
Confió en la ruta de desmantelamiento planteada por autoridades de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) que constará de dos años a partir de este 18 de marzo.
