Mexicali, Baja California.- El Museo Wok de la comida china ha sido cerrado por el Ayuntamiento de Mexicali por considerarlo riesgoso para sus visitantes. Se trata de uno de los atractivos entregados al final de la gestión de la ex alcaldesa Marina del Pilar Ávila Olmeda, antes de lanzarse oficialmente a la campaña por la Gubernatura eñde Baja California.
”Para el XXIII Ayuntamiento de Mexicali, la seguridad de las familias en nuestros espacios de recreación, esparcimiento y cultura es muy importante. Por tal motivo se ha decido realizar revisión estructural al Museo Wok en la zona Centro de Mexicali. En próximas fechas comunicaremos si es viable la reapertura para que sigamos conociendo sobre la comunidad china en nuestra ciudad”, fue el mensaje publicado la tarde de este viernes en la página de este museo.
Enclavado en la destruida avenida Juárez, la cual lleva meses en reconstrucción, el Museo de la Comida China fue presentado como uno de los más atractivos proyectos de la administración municipal. Se trata de un viejo edificio del Centro Histórico de Mexicali, cercano a la zona conocida como La Chinesca, cuyo primer piso fue remodelado con recursos del Ayuntamiento de Mexicali.
Junto con este atractivo, también fue presentado el proyecto denominado Mexicali, Capital de la Música, del cual no se supo más nada posteriormente, así como de los recorridos en autobús por los sitios más atractivos y emblemáticos del centro de la ciudad.
El Museo Wok fue habilitado como tal con recursos provenientes del Instituto Municipal de Arte y Cultura, en ese entonces dirigido por Norma Bustamante, hoy alcaldesa electa de Mexicali, y actualmente también el recurso invertido en este proyecto es revisado por el equipo de Lupita Mora, actual Presidenta Municipal, según ella misma lo confirmó.
Oficialmente se dijo que el remozamiento del primer piso donde se encuentra ubicado el museo, fue de 2 millones de pesos. Estas obras no incluyeron la reparación de la estructura del inmueble que será sometido a una revisión a fondo para descartar cualquier peligro para sus asistentes.
