Hoy Mexicali representa la ciudad con mayor cantidad de personas contagiadas por COVID-19 del noroeste del país, con una alta posibilidad de infectarse y enfermarse por esta enfermedad, declaró anoche el secretario de Salud, Alonso Óscar Pérez Rico, a su salida del Hospital General, donde unas horas antes personal de enfermería se manifestaron por las extenuantes jornadas laborales.
Aunque mujeres que se manifestaron aseguraron que el hospital estaba saturado y que incluso había pacientes que habían fallecido a las afueras, mientras esperaban un lugar para ser recibidos, el Secretario de Salud sostuvo que sí hay aún suficientes camas y ventiladores.
“Están disfrazando cifras”, dijo una de las enfermeras que se manifestó, a la vez que reconocieron que durante la última semana la cantidad de contagios y de decesos se había disparado aún más, al grado de tener que darle prioridad a los pacientes jóvenes por encima de los adultos mayores con diabetes, obesidad e hipertensión, al momento de asignarles equipo.
Sin embargo Pérez Rico en un recorrido transmitido en vivo a través de la página de Facebook de la Secretaría de Salud, mostró que había más de 25 ventiladores disponibles en el hospital, además de los que hay en otras ciudades que pueden ser trasladados a esta capital si es necesario.
Reconoció que los pacientes con una situación más crítica de salud se destinan al tercer piso, pero ahí se les están proporcionando cuidados paliativos. Negó que se les deje de atender o de suministrar lo necesario para tratar de sacarlos de la etapa crítica.
Las quejas expuestas a las afueras del Hospital General de Mexicali, fueron en torno a que hace una semana Pérez Rico les prometió reajustar sus horarios laborales, lo cual no ha sucedido.
El mismo Secretario reconoció, horas después, a su llegada a este mismo hospital, que falta personal, que muchos llegan a trabajar y después de una jornada deciden ya no presentarse, por la pesada carga de trabajo que se encuentran.
Antes de responder preguntas de los reporteros, el Secretario recorrió parte del hospital, para mostrar que hay equipo suficiente para dotar a los trabajadores de la salud que a diario van a laborar a este nosocomio.
Sin embargo, alertó a la población sobre lo que está pasando en Mexicali. Hoy la cantidad de personas intubadas en Tijuana es la misma que en Mexicali, pese a que se trata de una ciudad con una densidad poblacional más baja.
“La curva de Mexicali es el pico más alto de pacientes activos en el noroeste del país”, señaló el Secretario de Salud, quien insistió que “si por algún momento sintieron una falsa sensación de seguridad…eso no es cierto. El COVID lo transmiten de persona a persona.”
“El día de hoy es el día en que más riesgo existe de yo salir a la calle a Mexicali e infectarme y enfermarme”, dijo Pérez Rico.
Hasta el corte más reciente presentado por la Secretaría de Salud de Baja California, la cifra de muertes en Mexicali por COVID-19 había llegado a 500, mientras que Tijuana y Ensenada reportaban cifras a la baja.
Mexicali se anotaba 527 casos activos, incluyendo 105 casos nuevos documentados en las últimas 24 horas.
En ese mismo periodo se registraron 105 nuevos casos confirmados en el estado, llegando a 6 mil 194 acumulados.
A la fecha se han registrado un total de 1 mil 271 fallecimientos en Baja California, de los cuales 644 han sido en Tijuana, 500 en Mexicali, 54 en Ensenada, 50 en Tecate, 9 en Rosarito y 4 en San Quintín.
Hay mil 276 casos de pacientes recuperados y se han aplicado un total de 10 mil 612 pruebas.
