Mexicali, Baja California.- A sabiendas de que en Mexicali existen diversos problemas relacionados con el medio ambiente y sociedad, nos dimos a la tarea de realizar una entrevista con Isadora Clark Ordoñez, quien es Jefa del Departamento de Gestión Ambiental del Ayuntamiento de Mexicali, para hablar precisamente de un tema que nos parece fundamental: la educación ambiental.
Llegar a más públicos
En la Dirección de Protección al Ambiente tienen actividades de educación ambiental dirigida al público infantil, partiendo de la idea de que son ellos, los niños y niñas, quienes con su nobleza e inteligencia, pueden incidir en el comportamiento del adulto, además de ir formando futuras generaciones con mayor cuidado y respeto por el medio ambiente. Sin embargo, en palabras de la responsable de gestión ambiental municipal, Isadora Clark, “a lo largo de la vida hay que seguir reforzando los conocimientos en temas prioritarios”. Así fue como dentro de la dirección donde labora, pasaron de ser tres jefaturas de áreas que había, la de regulación, educación y planeación, a cuatro, sumándose la jefatura de forestación y la que era de educación, se convirtió en gestión, dándole mayor impacto a las acciones de educativas.
Prueba de ello, es que dieron un brinco hacia otros públicos, sin dejar de ser los niños en etapa de educación básica, el proyecto central. Sorteando la restricción de recursos económicos, con la contribución de “aliados” como la Agencia de Protección al Ambiente de Estados Unidos, o EPA por sus siglas en inglés, están llevando a cabo un proyecto de producción de materiales educativos con contenidos de suma relevancia para los temas de la región, como es la calidad del aire, residuos sólidos urbanos, áreas verdes y conservación de espacios naturales.
En esta parte de conservación de espacios naturales, sólo por mencionar uno, destaca las lagunas de Mexicali, que si bien ahora mismo -a simple vista- no aparentan ser lugares muy atractivos, “tienen un valor ecológico muy importante. Quizás vemos la Laguna México y decimos ‘está abandonada’, la Xochimilco está sucia por el centro de transferencia o van dar los drenes, pero son cuerpos con agua que contienen vida, hay registro de muchas aves migratorias, son relictos donde el agua respira y hace su metabolismo y urge rescatar esos cuerpos de agua”.
Es necesaria su recuperación para que el agua mantenga su metabolismo natural y que no se pierdan las especies, y sobre todo, que se convierta en un paisaje reconocido por la comunidad en la actualidad.
“Quisiéramos tener más recursos y ampliarnos a labores como lo que hacen otras organizaciones de la sociedad civil como Sonoran Institute, Restauremos el Colorado, Pronatura, Río Hardy. En el Río Hardy, con todo y las disputas que ha habido, desde hace unos diez años a la fecha, se nota la recuperación e incluso hay actividades de recreación y se reconoce el paisaje, los adultos mayores conocían de esos lugares”.
En un crecimiento acelerado y falto de organización de la mancha urbana, se han ido impactando los espacios naturales y se genera un desapego hacia estos lugares, dando la sensación de que “la ciudad no es tuya y si así lo sientes, la dejas de cuidar”.
Es por eso que en el programa de intervención educativa, se trabaja con dirección a más públicos además de los niños. En un esquema colaborativo, actualmente la Dirección de Protección al Ambiente de Mexicali, trabaja con El GarageProject Hub, un espacio creativo e innovador en la enseñanza, en la elaboración de materiales educativos con la intención de que los niños, no sólo aprendan, sino propongan, sobre la problemática ambiental en su localidad y como mejorar; sobre este punto en particular, nos adelantó Isadora Clark que próximamente, estarán dando a conocer un sitio virtual.
Otra parte de los materiales están siendo diseñados para la capacitación docente, que de hecho, ya se llevó a cabo una jornada virtual por las condiciones de la pandemia y en cuanto las actividades se reestablezcan, se continuará con esta labor para cubrir más escuelas, llegar a más maestros, presentarles los materiales, mismos que quedarán disponibles en el sitio web de manera gratuita. Y una tercer público, son directivos de centros escolares y padres de familia, con la firme intención de que puedan impulsar proyectos ambientales en las escuelas, que sirvan para favorecer sus áreas verdes, manejo de residuos, aprovechamiento del agua, energía eléctrica, etc.
Sobre los adultos, ¿Tenemos compostura en educación ambiental?
Alguna vez, la que escribe escuchó a un ambientalista decir que no le agradaba tanto esto de educar sólo a los niños, como si los adultos no tuviéramos remedio, así que era una pregunta obligada para la especialista Clark Ordoñez. Para nuestra fortuna, la respuesta es sí.
“¿Si podemos revertir la mala educación ambiental?, sí, definitivamente sí, está visto que si encontramos la ganancia en algo modificamos el hábito, pero tenemos que encontrar la ganancia y eso está sucediendo. Para las nuevas generaciones se vienen cambios en los espacios laborales, orientados hacia otro tipo de economías que pueden surgir de actividades relacionadas con el medio ambiente. Un ejemplo local, es “Compóstate bien”, (recolectan residuos orgánicos para generar composta), proyectos de ese tipo, van a crecer, cuando logren ligarse con otros, para ampliar su impacto”.
Siguiendo en el tema de los adultos y retomando el valioso espacio que hay alrededor de las lagunas, nos dice “cuando encontremos la ganancia de tener un parque ecosistémico y un lugar donde ir a caminar sin tener que ir fuera de la ciudad, que nos dé un grado de silencio que todos necesitamos, de tranquilidad, vamos a cambiar los hábitos, es lento pero lo tenemos que hacer”.
“También nos hemos ido a hacer jornadas de sensibilización con universidades, capacitación a los agentes de seguridad pública, no sólo a la policía ecológica; a todos los que se quisieron sumar, porque pueden aplicar el reglamento y están facultados para multar si hay quema de basura, si hay tiradero de agua”.
Las artes y medio ambiente.
En fechas recientes la DPA organizó la primera bienal de fotografía y paisaje natural, precisamente para ayudar a que se reconozcan los espacios naturales de la localidad.
¿Son las artes una alternativa para la educación ambiental?
“El arte, el espacio artístico, ha ido encontrando su lugar, como otra área productiva de la sociedad. Hay muchas iniciativas ciudadanas, se han abierto escuelas, universidades, no sólo en el centro del país; entonces, hay una línea fuerte de artistas que traen toda la intención de generar una narrativa de sensibilización por el medio ambiente y la manera en que habitamos el planeta”. En algunas artes, ciertos materiales de desecho se han convertido en parte de las obras y expresiones artísticas. En cuanto a la relación con la educación, resultan convenientes los espacios artísticos, toda vez que se diversifican los escenarios donde la gente de todas las edades, puede aprender y así se fortalece el proceso de aprendizaje.
¿Cómo hacer que trascienda?
Para que las acciones en materia de educación ambiental, en este caso de una administración municipal, transcienda, debe haber vinculación.
A unos meses de dar por terminado el trienio municipal, Isadora Clark asegura que dejarán líneas de trabajo específicas para que quienes lleguen, innoven y se vayan adaptando a las circunstancias actuales.
“Nosotros cambiamos el reglamento que estaba desde los años ochentas; en cuarenta años las cosas han cambiado mucho, y ahora nos podemos coordinar mejor para gestionar y vincularnos”.
Y de parte de la sociedad, ¿qué falta para mejorar nuestro comportamiento respecto al medio ambiente?
A la sociedad, hay dos temas principales que le interesa: seguridad social y salud pública.
Tenemos que lograr entender el cuidado del medio ambiente desde estas dos perspectivas, para que sea el tercer tema prioritario.
“Pongamos un ejemplo de un estudiante que camina todos los días para llegar a su escuela, tiene que atravesar un lote valdío, que tiene basura, que hay quemas por personas en condiciones de calle, ahí el problema ya no es sólo del delito ambiental, sino de riesgo de seguridad, muy diferente a lo que sería si el lote estuviera cercado, arbolado, cambiaría radicalmente la situación”.
El ver o tener que atravesar lotes valdíos descuidados, da la sensación de desvalorización y tiene repercusión emocional. Además de las afectaciones físicas por una mala calidad del aire, del agua, suelo, etc, hay un impacto a la salud mental.
La pregunta del millón.
¿Cómo hacer para que la gente participe, se involucre?, “Donde hay iniciativas ciudadanas, las cosas pueden suceder”. Otro buen ejemplo, lo que sucede en EcoJardines(vecinos de Jardines del Lago que se organizar para recolectar y reciclar en beneficio de su comunidad), es para modelar en otros fraccionamientos. Cuando se hacen núcleos de organización, se da la colaboración. La práctica social debe prevalecer, para tener mejores áreas verdes, para que la gente no tire agua, tener un parque bonito, lotes sin basura,hacer comunidad es la clave”.
El valor real
No podíamos finalizar interesante charla sin preguntar cuál es el valor que debemos darle al medio ambiente, que igual y da para una amplia discusión sociológica, pero nos quedamos con esta frase:
“Una gran parte de las actividades económicas irán cambiando en función de los recursos naturales; la alternativa hoy en el discurso ambiental es, la economía no va a prosperar si se acaban los recursos naturales”.
