Mexicali, Baja California.- Una lluvia de balas que se registró en el fraccionamiento Casas Geo, del poblado Ciudad Morelos, dejó saldo de dos personas muertas y cuatro lesionadas, entre las que están dos menores de edad y una mujer. Los responsables del ataque lograron huir, aunque olvidaron parte de su equipo, que podría ayudar para identificarlos.

A las 23:40 horas de este jueves, comenzaron a sonar los teléfonos de la central de emergencias, luego que vecinos de la avenida Palo Verde, de este fraccionamiento ubicado en la comunidad también conocida como Cuervos, reportaron que se estaba registrando una nutrida balacera y que al parecer eran armas de grueso calibre las que se estaban usando.

Elementos de la Policía Municipal acudieron a atender el incidente y en minutos localizaron el lugar donde se dio el incidente. Había al menos 50 casquillos percutidos calibre 7.62, de los usados por los fusiles AK-47 cuerno de chivo en derredor del domicilio donde se dio el ataque.

Ahí mismo los policías encontraron tres personas lesionadas, entre las que había una mujer de nombre Margarita, de 35 años de edad; dos menores de edad, uno de ellos de 15 años que recibió un balazo en el hombro derecho, y otro más cuyas heridas no fueron señaladas, así como un adulto de nombre Antonio de Jesús, de 32 años, quien sufrió heridas en el codo, brazo y antebrazo izquierdo.

Los cuatro fueron llevados en ambulancia al hospital civil de Mexicali, en sendas ambulancias de la Cruz Roja y de Bomberos, todas debidamente resguardadas por policías preventivos.

En el interior de la vivienda además fueron encontrados sin vida dos hombres de entre 35 y 40 años de edad. Los dos eran de complexión robusta. Uno de ellos vestía un pantalón de mezclilla azul, camiseta roja y tenía varios tatuajes en el cuerpo; el otro vestía pantalón y camiseta color negro.

Los agentes preventivos acordonaron la escena del incidente y esperaron a que llegaran al lugar los fiscales que se harían cargo de la investigación, así como personal de Servicios Periciales y empleados del Servicio Médico Forense.

Según testigos, los asesinos llegaron y después de rafaguear el domicilio en cuestión, huyeron a bordo de dos automóviles; uno blanco y uno gris, sin dar más detalles de los mismos.

En las prisas por escapar los criminales abandonaron un equipo de radiocomunicación, el cual podría servir para dar con su identidad y su paradero.

 

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